jueves, 31 de julio de 2014
martes, 29 de julio de 2014
LAS CHINCHE WARS. CAPITULO 5. BAJADA DE MORAL
Estamos bajos de moral. Parecía que la guerra
iba bien, pero hoy ha sido un día duro. Un chinche cabrón se ha infiltrado en
mis vaqueros y a medio día me ha empezado a picar las picaduras. Me he quitado los
pantalones y tenía un camino perfecto de picaduras que ascendía por mi pierna
izquierda, bordeaba mi entrepierna y bajaba por la derecha. Un trabajo fino y
silencioso. Ni rastro del zapador. He tenido que poner la ropa a lavar y
ducharme, pero ya era tarde. Se nos están riendo en nuestra cara. Esta noche
pasada también sufrí picotazos en la parte trasera de la rodilla, en mi propia
cama!! No sé cómo se ha colado, Saray dice que la manta estuvo tocando el suelo
parte de la noche.
En fin que nos han golpeado duro la moral. Voy
todo picado otra vez, Saray también ha sufrido picaduras en el cuello esta
tarde, ni siquiera estaba en la habitación, puede que también tenga alguno en
la ropa. Sin indetectables, son sigilosos,
extienden sus dominios, y atacan cuando menos nos los esperamos. Nos están
mermando la moral. No sabemos cómo darle un giro a esto.
lunes, 28 de julio de 2014
LAS CHINCHE WARS. CAPITULO 4. LA ARTILLERIA PESADA
LA CHINCHE VIVEEE! LA LUCHASIGUEEE!
Las trampas de CO2 parecen haber sido un
fisco, ni una baja en 3 días. Lo que sí parece estar funcionando son las
barreras de protección de la cama. Hemos tenido noches más tranquilas. Ayer la capitana
Mañas, directora ejecutiva del departamento de armas químicas, hablo con un
experto y le recomendó comprar Cipermetrina. Según parece es un arma potente.
Disuelto en agua y pulverizado acaba con los chinches y no es muy toxico para
los humanos. Así que hemos comprado y rociado la habitación de invitados para
hacer la prueba.
Esta noche ha habido otra buena noticia, en
una misión de exploración de mi parte he encontrado un chiche viva, aunque
desearía estar muerta. La menos metido en un bote de cristal para comprobar que
no pueden trepar el cristal. No pueden. Y luego la doctora Menguele Mañas le ha
rociado con la cipermetrina para ver si era efectiva y cuanto tardaba en morir.
Parece que funciona.
La solución definitiva se acerca.
viernes, 25 de julio de 2014
LAS CHINCHE WARS. CAPITULO 3. LA TENSA CALMA
Barreras adherentes en patas de cama.
LISTO!!
Mezcla generadora de CO2.
LISTA!!
Recipiente atrapa chinches.
LISTO!!
Señuelos térmicos.
LISTOS!!
Todo preparado para la primera noche. El primer contacto. La
carnicería inicial de victimas por ambos lados. Iban a correr ríos de sangre,
toda nuestra viniera del bando que viniera, por cierto.
Nos enfundamos los calcetines sobaqueros. Apagamos la luz, e
intentamos dormir, imaginándonos la cara de sorpresa de los chinches al
intentar subir por las patas de la cama o al caer en el vote de cristal. La
guerra tiene sus momentos dulces.
RIIING. SUENA EL DESPERTADOR. HORA DE HACER RECUENTO DE
VICTIMAS!
Barrera pegajosa.
0 VICTIMAS!
Recipiente atrapa chinches.
0 VICTIMAS!!
Picaduras en nuestro cuerpo.
0 PICADURAS NUEVAS!!!
Un momento que ha pasado? Donde mierda se han metido los
chiches? Porque no atacaron en hordas sucesivas? Ni rastro de su presencia.
Ayer me masacraron los pies, y hoy ni aparecen. Esto es muy raro.
Estamos desconcertados, no sabemos que pasara esta noche. No
teníamos levadura química en casa y lo hicimos con otro tipo de levadura, así
que quizás no se generó bastante CO2. O quizás treparon por el cristal del
bote, alguno recomiendan untarlo con polvo de talco. Lo que es seguro es que no
nos picaron. Eso quiere decir que no están en el colchón ni en el somier. Eso
creo.
Es demasiado raro todo. No sé qué haremos ahora. Tenemos que
pensar. Tenemos que pensarlo muy bien. Algo se nos escapa.
jueves, 24 de julio de 2014
LAS CHINCHE WARS. CAPITULO 2. ESTRATEGIAS DE LUCHA
Con semejante panorama uno podría pensar. Estamos jodidos.
Total la casa es rentada, busquemos otra, quememos la ropa y empecemos de
nuevo.
Eso está muy bien para cobardes, pero uno tiene su orgullo,
y no hemos llegado a la cúspide de la cadena alimenticia para ahora claudicar
ante un insecto.
El conocimiento es poder. El conocimiento es poder. El
conocimiento es poder.
Qué hacemos?
La opción cómoda es acudir a un profesional. Control de
plagas, arroje napalm en toda el área. Haga que esos pinches charlies salgan de
la selva ardiendo. Muy glamurosa pero un hombre de verdad resuelve el mismo sus
peleas.
Después de leer intuyo que el ataque directo no es una buena
opción. Fumigarlos con insecticida no ha funcionado. Remover toda la habitación
buscando nidos no ha funcionado. Despertarme a mitad de noche cuando sentía picor
no ha funcionado. Ni siquiera ignorarlos ha funcionado.
Ok, tercera opción, guerra defensiva. Más bien se trata de
una combinación de defensa pasiva y merma lenta de sus efectivos. Y se basa en
2 de sus puntos débiles. No pueden escalar superficies pegajosas o muy lisas. Y
se ven atraídos por fuentes de calor y CO2.
La implementación de la táctica empieza hoy, y consiste en:
- Captura de un espécimen adulto vivo para
someterlo a experimentación de que superficies puede escalar y cuáles no.
- Construcción de mecanismos de barrera para
la cama. Recomiendan poner cinta adhesiva de doble cara alrededor de las 4
patas, para que se queden pegados. Y evitar que la cama o sabanas toquen ninguna
pared o el suelo. Rezar porque no haya nidos en la propia cama.
Si no funciona comprar metros de plástico y
crear una bolsa gigante para la cama, de forma que duermas aislado de la cama y
del suelo.
Si no funciona entregar la cama y bajarte a
dormir al salón.
- Construcción de mecanismos de captura y eliminación
de unidades enemigas. Aquí está el buque insignia de la guerra. La trampa de
CO2. Una botella llena de agua tibia+levadura+azúcar, que va generando CO2. El cual
sale por una pajita y va a un vaso. Dicho baso tiene unas telas que hacen de
puente entre el suelo y el vaso para que los chinches trepen y caigan dentro
del vaso. El vaso se puede untar con polvos de talco para que el engendro no
escape. Luego solo queda elegir el método de darles muerte: MUHAHAHAHAHAHA.
Algunas perfecciones de la trampa añaden una
manta eléctrica cercana como foco de calor. Es diabólicamente perfecto. Pero aquí
no tenemos eso.
Bueno dejo de escribir ya y me pongo a construir todas las
chunches necesarias. Mañana fotos y primer informe del frente de batalla.
miércoles, 23 de julio de 2014
LAS CHINCHE WARS. CAPITULO 1. CONOCE A TU ENEMIGO
Si algo hemos aprendido de ver películas orientales de
guerras es que el primer paso de toda guerra es conocer a tu enemigo, y para
eso nadie mejor que golpe.
Básicamente un chinche es una garrapata para humanos. Un
insecto asqueroso que lleva unos cuantos millones de años viviendo
exclusivamente de nuestra sangre, y así seguirá varios millones más sino nos
extinguimos.
La bibliografía es vastísima, y deja entrever la guerra mundial
que personas de todo el mundo han emprendido contra los chinches, la rabia
acumulada, y la imaginación volcada en la empresa. Por cierto no os ilusionéis,
vamos perdiendo la guerra. Los más pesimistas abogan por que tires todos tus muebles
a la basura, y que incendies la casa directamente. Gente clama ayuda en todas
las lenguas con muchas exclamaciones al final de la frase.
Para muestra un botón. Si, los chinches tienes su propia Wikipedia.
Bueno vayamos a lo que nos interesa. Puntos débiles, por
donde atacar.
- Los chinches viven en sitios oscuros y húmedos.
Pliegues de tejidos, grietas de muros, huecos de madera, etc. Si quieres
atacarles directamente, busca ahí sus nidos.
- Ataques químicos: Para el occidental medio
un insecticida es un producto mágico que acaba con todos los problemas
relacionados con insectos. Lamentablemente los chinches son bastante resistentes
a los comerciales. Lo único que consigues rociando tu habitación con
insecticida es esparcirlos por toda la casa. Ok, y me lo dicen ahora.
- A los chiches no les gusta la luz intensa,
ni el calor intenso. Pero como en el caso anterior, alumbrándolos con luz o dándoles
con un secador de pelo en los nidos, solo consigues que se dispersen. Más te
vale matarlos a todos antes de que escapen.
- Perseguirlos uno a uno como asesino a
sueldo no es muy eficaz. Cuando te das cuenta que están en casa ya son más de los
que puedas localizar a ojo.
- Bueno al menos no pueden volar, los
chinches andan como cualquier hijo de vecino, y solo trepan superficies
rugosas. Por lo que muchos abogan por tácticas de creación de barreras para
convertir tu cama en un bastión inexpugnable. Esto no acaba con los chinches
pero al menos te dan una victoria moral evitando que no te acribillen por la
noche. Ojo se han reportado casos de chinches que se dejan caer desde el techo
sobre ti. ¿Una nueva raza de superchinches?
- Los más cobardes abandonan su cama a la
primera andanada de picaduras. Ojo, cubrirte pies y manos con calcetines y
guantes (en el caso de que el clima no sea muy caluroso) solo consigue que
todos te piquen en el cuello y la cara.
- Como localiza un chinche a un humano
dormido? Por el calor que desprende y por el CO2 de su respiración. Estamos
jodidos porque no podemos dejar de respirar ni de estar calientes. La única opción
es algo insolidaria es dormir al lado de un gordo que ronca. El desprende más
calor que tú, mas CO2, y tiene más superficie de piel. TRIPLE WIN.
- Puedes aguantar sin comer 90 días. Así que olvídate
de una guerra de desgaste.
- Los adultos son marrones y fácilmente
detectables. Pero las crías que aún no han probado sangre son transparentes y
muy pequeñas. Casi indetectables a l vista.
- La picadura solo se inflama al rato de
producirse, por lo que el chinche ya está en casa cuando tú te rasques.
- Y ya paro porque si no me voy a deprimir.
Dejo para el próximo capítulo las estrategias de ataque.
En fin señores, este es nuestro enemigo. No
sabemos cómo llego, pero ha venido para quedarse. Es más numeroso que nosotros,
más resistente y ataca por las noches. Esto no será fácil.
martes, 22 de julio de 2014
CAPITULO 0. LA HORA DE LOS VALIENTES
Cuando uno decide irse a vivir a un país del tercer mundo,
hay una guerra que sabe que tendrá que combatir tarde o temprano. Uno se puede
hacer pendejo y creer que saldrá de la experiencia sin tener que librar esa
guerra. Pero se equivoca. Ese día llegara tarde o temprano. Y ese día ha
llegado para nosotros.
LAS CHINCHE WARS
En efecto, el enemigo eterno son los chinches. Un enemigo
desconocido para la mayoría de nosotros, asociado a episodios puntuales como
hostales cochambrosos de paso, o pisos de estudiantes en los que un día tuvimos
que trasnochar.
Más o menos las fases anteriores a la aceptación de la guerra
fueron las siguientes.
- Negación: Otra vez le están picando los
mosquitos a nuestro compañero de casa.
- Es problema de otro: Jajá, se le ha llenado
la habitación de chinches y se ha bajado a dormir al salón.
- Esto no ira más allá: El compañero de piso
saca todos los muebles del cuarto y fumiga a base de insecticida.
- Vislumbración de la guerra: Picotazos múltiples
en tu cuerpo un día al amanecer.
- Subestimación del enemigo: Rociamos de insecticida
y nos vamos una semana de vacaciones, al vuelta todos muertos por química o por
hambre.
- Desconcierto: No han muerto.
- Aceptación: O ellos o nosotros.
Adjunto fotos de los daños. Parecen mosquitos contundentes. Cuando se va la inchazon ves que son grupos de unas 5 o 6 picaduras alineadas cual ráfaga de ametralladora.
jueves, 10 de julio de 2014
CumpleTacos Saray
Fotos de mi vigésimo octavo cumpleaños en México, pero celebrado a lo español.
Pasen y vean!
Pasen y vean!
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